La Calata Culta Viernes, 6 julio 2018

Conoce la feria de libros alternativa, «Antifil», a través de sus valientes creadores

La Calata Culta

Leslie Guevara es directora de la escuela de escritura Machucabotones. Es autora invitada en los libros de relatos "Sexo al cubo", "Hermosos ruidos" y "21 relatos sobre mujeres que lucharon por la independencia del Perú". Es editora del libro “Once Veces Tú”. Ha realizado talleres de narrativa en cárceles peruanas, en coordinación con la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad fundada por el padre Hubert Lanssiers. Actualmente escribe su primer libro.

Fotos: César Bedón Rivera

Título original:

ENTREVISTA: «La Antifil no tiene miedo de hablar de LGTBI o del cannabis»

Me olvidé cómo se escriben los “gorros” de las entrevistas. Y quiero publicar esta entrevista hoy. Así que lo diré así. Hace unas semanas tomé lonche con Franco y Gloria. Comimos galletas de soda y tomamos café. Ellos son los organizadores de la Antifil. A mí me sorprendió que me invitaran lonche. ¿Qué es la Antifil? Cuando entré a la casa de Franco y vi las tacitas sobre la silla pensé Pucha, estoy haciendo mal tercio… Y Gloria me dijo Siéntate, es para ti. La Antifil es una feria del libro alternativa. No cobran la entrada. Y trabajan con el corazón. Les gusta su chamba. Es la tercera vez que se organiza este evento en el Perú, este año hay más talleres gratuitos. Lo bacán de la Antifil es que quieren hacer las cosas de forma diferente. Por ejemplo, el titular de la nota de prensa que me envió Gloria decía Ellas son las protagonistas, Feria Alternativa del libro ANTIFIL tendrá espacio dedicado a narradoras, poetas e investigadoras. Cuando leí eso dije Qué bacán. Quiero conocer a estos chicos. Un gato se acomodó a mi lado y me dijo #AndaALaAntifil.

Qué bonito tu polo.

Franco Osorio-Antunez De Mayolo: Es el polo de este año. Hemos estado vendiendo merchandising.

¿Y qué tal es la Anti chela?

Franco: Es necia. La que es rubia tiene sus 6 grados. Y la negra es la mas chévere.

Gloria Alvitres: Nosotros nos relacionamos mucho con los productores jóvenes.

¿Cuándo empieza la feria?

Gloria: Del 25 al 29 de Julio en la asociación Guadalupana en Breña.

¿Cómo nace la Antiferia?

Franco: Un día tuve una pesadilla. Sentí que me moría y cuando me levanté sentí que tenía que hacer algo. Y justo en ese tiempo, fue la epoca del 2016, y las noticias eran que había incrementado el precio de la FIL  y yo dije Hay que hacer una feria alternativa.

Qué bacán.

Franco: Y como tuve la experiencia de haber ido ya a una “anti feria” en Guadalajara y en Ecuador, algunas ideas tenía.

¿Como cuáles?

Franco: En estas ferias no había todo esa lógica mercantilista. Allá buscaban editoriales independientes. Y encontrabas de todo a nivel artesanal.

¿Y el nombre cómo salió?

Franco: Salió de allá, de lo que viví en México.

Gloria: Y yo te puedo contar cómo surge la convocatoria. En el escenario de Lima siempre han existido recitales y cosas que se hacían en los bares. La primera Antifil surge porque realizamos una convocatoria y juntamos editoriales independientes y artistas. Todo el mundo estaba haciendo cosas, pero no se les había ocurrido juntarse.

¿Ustedes son amigos? ¿Por qué trabajan juntos?

Gloria: Nosotros nos conocemos por la convocatoria. Ahora somos muy patas, jajaja. Ya nos hemos aguantado un montón de cosas.

Franco: Claro, de hecho cuando se me ocurrió lo de la feria lo primero que pensé fue Esto es imposible hacerlo solo. A mí se me ocurrió convocar a las personas que me parecían serias.

¿Cómo fue la primera Antifil?

Franco: Fue una reacción de rebeldía porque no le encontrábamos sentido a la programación de la FIL. En ese tiempo era el último libro de Gastón, y todo bien con Gastón. YouTubers, los mismos libros comerciales que ya están rondando casi siempre. Y por eso tuvimos la visión de incluir a escritoras.

Gloria: Queremos ser el medio para que muchos jóvenes artistas muestren su trabajo. Este año hay varias narradoras. La feria es muy diversa. La Antifil no tiene miedo de hablar de LGTBI o del cannabis. Por ejemplo, este año viene Danitza de Chile, es una activista del cannabis. Tenemos un espacio que es sumamente abierto para hablar de todas las cosas. Nos ha costado.

¿Qué les ha costado?

Gloria: Ha habido muchos trolls. Ja, ja, ja.

Siempre hay trolls, ¿qué les dicen?

Gloria: Nosotros trabajamos con el  lenguaje “inclusivo”. Y a veces eso le fastidia a cierto público. El nosotros y nosotras lo cambiamos por la X, o sea nosotrxs, y se arma el debate. Por ejemplo, yo recuerdo que un año Caretas nos dijo que estábamos haciendo apología al  terrorismo.

¿Por qué?

Franco: Era por una performance que realizó un escritor chileno.

Igual los rebotaron…

Gloria: Pero nos pusieron etiquetas. Y la Antifil tiene que ser un lugar de diálogo abierto. Y los artistas tienen que tener un espacio abierto, no tendría que haber mayores censuras.

Franco: También hay un tema con el prefijo Anti.

¿Qué les dicen?

Franco:Normalmente esto sucede así, tú tienes tu contacto que es una persona joven, súper emocionado, que te puede decir Ya, hay que hacerlo. Y cuando tu contacto va con la cabeza de la institución luego nos dice Oye, no va tu proyecto porque es “anti”.

Qué tontos.

Franco: Eso nos pasa casi siempre. Entonces tengo que explicar que tenemos un discurso alternativo. Y por ese tema no tenemos auspicios. Y al mismo tiempo es bueno, porque podemos expresarnos libremente.

¿Y cuántas personas vinieron el año pasado?

Franco: Vinieron como 10.000 personas. Nos sobrepasó.

¿De qué se dieron cuenta en la primera edición de la Antifil?

Franco: Hicimos la primera y nos quedamos picones.

Gloria: Ja, ja, ja.

¿Por qué?

Franco: Dijimos Si hubiéramos tenido más tiempo… Pero lo que nos fregó un poco fue conseguir el local para la segunda edición.

Gloria: Conseguir el local fue un milagro. Ya teníamos la programación armada, todo listo supuestamente, solo faltaba una firma de una institución pública y dijeron que no iba. No firmaron.

Franco: Y nos quedamos sin local de la noche a la mañana.

Gloria: Pero ese día cuando empezaron a caminar por el centro, medios tristes, vieron un cartel al costado del Vichama, en una esquina hermosa que decía Se alquila.

Franco: Le pusimos el Antimilagro. Esa situación era crítica. Te imaginas que ya tenías organizado todo durante 3 meses y de la nada no tenías nada.

Qué fuerte. Y ahora qué vendrá.

Franco: Ya con el trauma de la primera, hemos empezado a trabajar desde octubre del año pasado para que todo salga excelente.

Gloria: Este año la feria va a tomar toda la casona.

¿Y quiénes van a venir?

Franco: Vendrán escritores de Chile, Ecuador, Agentina, y de Paraguay. También tendremos una videoconferencia con Alberto Fuguet.

Gloria, me hablabas de una presentación de mujeres escritoras…

Gloria: El tema de la variedad nos interesa un montón. Hay tantas buenas escritoras que era el momento de juntarlas para que dialoguen en un espacio.

¿Qué dirías para que vengan a la feria?

Gloria: Los precios son accesibles. Y no tenemos problema con la fotocopia. Entonces los invito a que se sumen a la Antifil.

Franco: Van a venir editoriales de Huaraz y Huancayo. Es trabajo realizado por gente joven. Haremos que se genere pensamiento crítico. ■

Si quieres escribir, escribirás. Así estés cansado. Con hambre. O con calor. Así no sepas por dónde comenzar. Así no te hayas bañado. Todos tenemos 10.000 historias dentro. Esas historias están esperando salir, pero no salen porque pensamos que debemos estar inspirados para sentarnos ante el papel o la pantalla de la computadora. Y así no es. Uno escribe, con ganas o sin ganas. Uno escribe para saber qué quiere escribir. Uno escribe para entender qué está escribiendo.

Escribe como los primeros habitantes de la Tierra. Escribe como un cavernícola.

Escribe alocadamente.

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La Calata Culta

Leslie Guevara es directora de la escuela de escritura Machucabotones. Es autora invitada en los libros de relatos "Sexo al cubo", "Hermosos ruidos" y "21 relatos sobre mujeres que lucharon por la independencia del Perú". Es editora del libro “Once Veces Tú”. Ha realizado talleres de narrativa en cárceles peruanas, en coordinación con la Asociación Dignidad Humana y Solidaridad fundada por el padre Hubert Lanssiers. Actualmente escribe su primer libro.